Llega el buen tiempo y con él las vacaciones: cada día apetece más coger el coche y escaparnos unos días lejos de las preocupaciones. Todos queremos estar seguros en la carretera, y sabemos que una buena planificación puede contribuir en gran medida a evitar accidentes.
El viaje nunca está completo si no se vuelve con vida. Lo mismo ocurre con la conducción y otras formas de transporte. Siempre se debe ser consciente de nuestro nivel de seguridad, sobre todo si conducimos largas distancias. En este artículo os dejamos 8 consejos para evitar accidentes en carretera durante viajes largos.
- Duerme al menos 7 horas antes del viaje
- Evita conducir de noche
- Para cada dos horas o cada 200 kilómetros para descansar
- Evita las bebidas alcohólicas y los estupefacientes
- Evita distracciones
- Deja distancia de seguridad
- Circula a una velocidad adecuada
- Señaliza tus movimientos
1. Duerme al menos 7 horas antes de un viaje largo
Cuantas menos horas durmamos, más probabilidades de causar y sufrir un accidente. Según una investigación publicada en la revista Oxford Academic, las probabilidades de verse en vuelto en un accidente de tráfico aumentan si el conductor ha dormido menos de siete horas en las 24 horas previas a realizar el viaje.
En España, entre el 15% y el 30% de los accidentes de tráfico están relacionados con la falta de descanso de los conductores.
2. Evita conducir de noche
Las horas más peligrosas para conducir son entre las 3 y las 5 de la mañana y entre las 2 y las 4 de la tarde. Aunque por norma general haya menos accidentes de día que de noche, estos suelen ser más graves en horario nocturno. Lo cierto es que la falta de luz nos obliga a estar más atentos y esto nos provoca fatiga.
En las horas de noche se produce un deterioro natural de la calidad visual debido a la pérdida de sensibilidad al contraste: nos cuesta más distinguir las figuras sobre un fondo y esto conlleva más riesgo de atropellar peatones, animales, alcanzar vehículos averiados o no ver bien las señales de tráfico.
3. Para cada dos horas para descansar
La DGT recomienda para cada dos horas o cada 200 kilómetros aproximadamente. Estas pausas deberían durar entre 15 y 20 minutos y deben servir para despejarnos y estirar las piernas, ya que debido a la conducción y el cansancio, nuestro cuerpo va perdiendo facultades.
El cansancio provoca falta de atención, menos precisión en los movimientos y errores en las decisiones que se toman.
4. Evita las bebidas alcohólicas y los estupefacientes
El alcohol está presente entre el 30% y el 50% de los accidentes mortales en carretera. Existe una relación entre el consumo de alcohol y muchas enfermedades y pasa lo mismo con los accidentes de tráfico.
El alcohol y las drogas funcionan como depresores del sistema nervioso central, afectando a nuestras funciones psicomotoras y alterando nuestra percepción sensorial, modificando el comportamiento y disminuyendo la capacidad para conducir un vehículo.
5. Evita distracciones
Existen tres tipos de distracciones: visuales, manuales y cognitivas. Para evitar distraernos y así evitar posibles accidentes, la principal recomendación es dejar a un lado los dispositivos móviles, en un lugar fuera de nuestro campo visual.
También se recomienda sintonizar la radio e introducir el destino en el GPS antes de iniciar la marcha.
6. Deja distancia de seguridad entre vehículos
Mantener una distancia de seguridad con el vehículo de delante nos dará margen para maniobrar en caso de emergencia o cuando tengamos la necesidad de esquivar un obstáculo. También nos permite cambiar de carril con tiempo suficiente y reducir la velocidad con más facilidad, evitando chocar con otros vehículos.
La DGT recomienda dejar 2 segundos de distancia de seguridad con el vehículo de delante, que será el doble (4 segundos) si nos encontramos en situaciones de baja visibilidad o en un túnel.
7. Circula a una velocidad adecuada
El exceso de velocidad es uno de los principales factores de riesgo en la carretera. Uno de cada cinco accidentes de tráfico con víctimas mortales está relacionado con el exceso de velocidad. Circular a una velocidad inadecuada influye negativamente en nuestras capacidades de conducción y nos expone a situaciones de alto riesgo.
La probabilidad de morir o sufrir lesiones graves permanentes es mucho más elevada cuando circulamos a gran velocidad que cuando lo hacemos a velocidad moderada.
La velocidad máxima permitida para turismos y motocicletas en autopistas y autovías es de 120 km/h y la mínima es de 60 km/h.
Según la DGT, una colisión a 50 km/h equivale a caer desde un tercer piso, mientras que una colisión a 120 km/h equivale a hacerlo desde el piso 14 y hacerlo a 180 km/h equivale a caer desde el piso 36.
8. Señaliza tus movimientos
El uso de intermitentes es imprescindible para indicar a los demás usuarios de la vía las maniobras que vamos a realizar.
Según Abertis, el 74% de los usuarios de autopistas no utiliza correctamente los intermitentes a la hora de cambiar de carril y regresar al mismo. Esto se debe en parte al «síndrome del carril izquierdo»: en una sección de tres carriles hay menos adelantamientos completados debido al uso por defecto del carril central en lugar del derecho.
Según la Guardia Civil, un 60% de los conductores no utiliza correctamente el intermitente en las rotondas y no indican cuándo van a abandonarla.