Las vacaciones de Semana Santa se acercan y este año tenemos más ganas de viajar que nunca. ¿Ya has pensado en tu destino? ¿Vas a ir en avión, en tren, en coche… o en autocaravana?
Ya sea alquilada, propia o prestada, viajar en autocaravana es una opción que gana adeptos año tras año, y es que estas ofrecen alojamiento y transporte a la misma vez, otorgando una libertad total al viajero.
En este post os explicamos cómo poner a punto vuestra autocaravana antes de iniciar vuestro viaje. ¡El primer paso es estar preparado!
- Escobillas y parabrisas
- Neumáticos
- Filtros
- Faros
- Líquido refrigerante
- Seguro para autocaravanas
1. Escobillas y parabrisas
Todos queremos y esperamos que haga buen tiempo mientras estamos de vacaciones, pero como ya sabemos, el tiempo es impredecible y debemos estar preparados para conducir en condiciones meteorológicas desfavorables.
El primer paso será comprobar que las gomas de las escobillas y los limpiaparabrisas no estén agrietadas y que efectúan la maniobra de barrido correctamente. Si no es así, deben ser cambiadas.
Para alargar su uso es recomendable limpiarlas una vez al mes con un algodón empapado en alcohol y un trapo.
Muy importante: no se deben usar los limpiaparabrisas para quitar el hielo que podamos tener: esto solo dañaría nuestro cristal.
2. Neumáticos
Los neumáticos son el único elemento de contacto entre el vehículo y la carretera, por ello es imprescindible que estén en perfecto estado. Debemos revisarlos buscando golpes, grietas o cortes.
Es fundamental llevar los neumáticos con la presión adecuada y revisarlos antes de emprender un viaje largo. La presión adecuada es la que recomiende el fabricante del vehículo y viene indicada en los papeles del coche. Un neumático con la presión baja reduce el agarre a la carretera provocando un desgaste irregular y dañando el neumático.
El dibujo debe tener al menos 1,6 milímetros de profundidad por ley. En caso contrario deben cambiarse, ya que de otro modo nos arriesgamos a sufrir aquaplaning.
Para garantizar su durabilidad se recomienda conducir de forma suave y evitar los bordillos a la hora de aparcar, evitando frenadas bruscas.
Y por último, y no por ello menos importante, ¡No te olvides de la rueda de repuesto!
3. Filtros
Limpiar el filtro de aire con frecuencia ayuda a mantener el buen funcionamiento del motor y evitar así el incremento del consumo de combustible. Su fácil acceso nos permite comprobar su estado y eliminar posibles obstrucciones.
Se debe revisar el filtro del aire acondicionado para mantener limpio y oxigenado el interior del vehículo.
4. Faros
Unos faros en buen estado iluminan correctamente la carretera y ayudan a que los demás conductores también puedan vernos. Aunque en semana santa ya haya bastantes horas de sol, nos encontraremos con ocasiones en las que nos toque conducir de noche o cuando esté oscuro.
Hoy en día la mayoría de vehículos han dejado de incorporar el cristal frontal de los faros y han pasado a usar plástico transparente, lo que provoca que con la larga exposición al sol estos terminen quemándose, deteriorando su calidad y reduciendo la visibilidad.
Para mejorar la visibilidad se recomienda pulir los faros y revisar posibles grietas y agujeros para evitar que no entren agua ni suciedad. A parte, si los faros están suficientemente opacos podemos encontrarnos con un resultado desfavorable en la ITV.
Pulir los faros de tu vehículo es claramente una opción más económica que cambiarlos y el proceso dura unos cuarenta minutos. Consulta a tu taller de confianza.
5. Líquido refrigerante
El líquido refrigerante o anticongelante es el encargado de mantener el motor a una temperatura óptima y regular, normalmente entre los 90ºC y los 92ºC.
Antes de salir de viaje, comprueba que no existan restos de óxido y que su color sea normal. Se aconseja usar el recomendado por el fabricante y no juntar dos líquidos distintos, ya que la mezcla de distintas propiedades puede formar una pasta sólida que provoca averías en el circuito.
Si tienes que reponerlo, ¡no olvides que debes hacerlo con el motor en frío! Los fabricantes recomiendan cambiarlo cada dos años. Si tienes dudas de cómo encontrarlo, el libro de mantenimiento de tu autocaravana te ayudará a localizarlo
6. Seguro para autocaravanas
Vale, ya lo tenemos todo preparado: autocaravana a punto, maletas hechas, ruta escogida… Ahora solo nos falta un seguro bueno, bonito y barato que cubra cualquier cosa que pueda pasarnos.
Un seguro de autocaravanas nos cubre los siguientes riesgos:
- Accidente de la caravana durante la circulación
- Incendio por accidente doméstico durante la acampada
- Robo en el garaje o en el camping
- Defensa jurídica
- Responsabilidad civil
- Daños por lluvias, vientos huracanados o corrimiento de tierras
- Rotura de claraboya por caída o golpe de ramas en el camping
- Actos de vandalismo
- Incendio, explosión y humo
- Caída de rayo o corrientes anormales de electricidad suministrada
- Lluvia, viento, pedrisco o nieve
- Inundación
- Agua por rotura de cañerías e inundaciones
- Olvido de cierre de grifos
- Escapes
En este enlace te ofrecemos toda la información necesaria para contratar un buen seguro para tu autocaravana. ¡A disfrutar de tus vacaciones!
